SOBRE NOSOTRES



FOTO TOMADA POR EVELYN MARTINEZ DE @XICANAYORK

JOVITA Y ESPERANZA son las abuelas paterna y materna de Angélica, mujeres indígenas que criaron a su comunidad y familia en el Distrito Federal.

Angélica nació en Nezahualcóyotl, México, y se crio en Astoria NYC, calle 4 y avenida 27. Jovita y Esperanza se creó como una respuesta a la devastadora gentrificación y el desplazamiento de la familia y la comunidad de Angélica, y transmite intencionalmente la energía de estar arraigada en dos lugares al mismo tiempo. Tanto Neza como Queens han influido en nuestros valores y nos han enseñado la utilidad de migrar con nuestras costumbres y traer nuestros remedios con nosotros.

En Jovita y Esperanza nos criamos en la dualidad del indigenismo y la religión, y en una sólida comunidad de curanderas y líderes. Habernos criado en México significa que creemos en la Virgen de Guadalupe como patrona y protectora de las mujeres, les niñes y las familias mexicanas; creemos en ella porque las abuelas en México creen en ella y tenemos fe en sus creencias. 

  • Nuestras prácticas, servicios y energía provienen de la confianza y la creencia en:

  • La conexión con nuestros ancestros. Les honramos practicando nuestras habilidades ancestrales al máximo de nuestras capacidades, habilidades que son especiales para nosotros individualmente o para nuestras familias en conjunto.

  • Los altares como una forma de comunicarnos con nuestros protectores y mantenerlos físicamente presentes en nuestros hogares, como un portal para la oración y las ofrendas.

  • El conocimiento que nos han transmitido nuestras abuelas y abuelos, nuestras tierras y nuestras familias extendidas. Nosotros, como cada familia, tenemos una forma única de ser y hacer las cosas, incluyendo la capacidad de ofrecer estos servicios.

Las familias de Angélica son de Guerrero y Oaxaca, y Jovita y Esperanza están profundamente influenciadas por nuestra tierra, la familia que la habita y quienes continúan viviendo allí y protegiéndola. Nos enseñaron intencionalmente a priorizar y ser valientes con respecto a la seguridad de las personas negras, indígenas e inmigrantes de la ciudad de Nueva York, e invitamos a otros a hacer lo mismo.

 

PICTURES TAKEN BY EVELYN MARTINEZ OF @XICANAYORK

JOVITA Y ESPERANZA are Angélicas paternal and maternal grandmothers, Indigenous women who raised a community of Indigenous and Mexican people in el Distrito Federal.

Angelica was born in Nezahualcoyotl, Mexico and raised in Astoria NYC, 4th street and 27th avenue. Jovita y Esperanza was created as a way to respond to the devastating gentrification and displacement of Angelica's family and community, and it intentionally carries the energy of being rooted in 2 places at the same time. Both Neza and Queens have informed our values and taught us the usefulness of immigrating with our costumbres and bringing our remedios with us. 

At Jovita y Esperanza we were raised in the duality of Indigenismo and religion, and a strong community of curanderas and leaders. Being raised in Mexico means that we believe in La Virgen de Guadalupe as THE patrona and protector of Mexican women, children and families, we believe in her because the grandmothers in Mexico believe in her and we have faith in their beliefs. 

Our practices, services and energy comes from the trust and believe in: 

  • The connection to our ancestors. We honor them through practicing our ancestral skills to the best of our abilities, skills that are special to us individually or to our families collectively.

  •  Altars as a way to communicate with our protectors and to keep them physically present in our homes, as a portal for prayer and offerings.

  • Knowledge that has been passed down to us from our grandmothers and grandfathers, lands and extended families. We, like every family, have an unique way of being and doing things, including the ability to offer these services. 

Angelica's families are from Guerrero and Oaxaca, and Jovita y Esperanza is heavily influenced by our land and the family who lay in it and those who continue to live in and protect her. We were intentionally taught to prioritize and be fearless about the safety of Black, Indigenous, and Immigrant people from NYC and we invite others to do the same.


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